La única demora que existe para alcanzar sus sueños, está en su mente, cuando
usted logra convencerla de que el sueño ya es una realidad, con toda seguridad
se realizará. Por esto le recomiendo que lo escriba. Una forma rápida de programar
su mente es escribiendo.
Redacte su sueño y empiece a actuar a favor de él. Imagine su propia película
mental, en la que usted, el ser más perfecto de la naturaleza es el protagonista.
Visualice en la película, cómo se va cumpliendo el sueño y dé gracias al padre
por haberle dotado de las cualidades necesarias para lograrlo.
Proyecte esta película varias veces, de día y de noche, en el momento en que
despierte y justo antes de dormir. Siga estas cuatro condiciones para que la
película funcione:
· Convénzase de que lo qué hay en la película, ya sucedió.
· No se escandalice. Asuma sus éxitos con naturalidad.
· Siempre proyecte su película estando en estado de tranquilidad.
· No le cuente la película a nadie, espere a que se vuelva realidad.
Refiriéndome a este ultimo punto, le diré que no debe usted compartir sus sueños,
porque pierden energía trayendo como resultado la frustración de sus ilusiones.
“La envidia no es compatible con la realización personal”
Si usted es de ese grupo de personas que no ha conseguido nada, es porque nunca
se lo ha propuesto, no ha sabido utilizar su poder mental o se dedica a muchas
cosas al mismo tiempo. La frustración creada por los continuos fracasos, hace
que llegue la incapacidad, el miedo y la angustia; por lo tanto, empieza a ver
superiores a las personas que sí han progresado en el logro de sus sueños. Esa
culpabilidad interior produce agresividad, la cual descarga hablando mal de los
que han triunfado, en lugar de encontrar la diferencia y propiciar los cambios
necesarios para, de igual manera, triunfar conquistando sus sueños.
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