Estaba leyendo en la sala de espera del oculista cuando una entrevista en televisión llamó mi atención. Había una celebridad de Hollywood hablando de su salud. Me van a perdonar pero no recuerdo su nombre, tampoco se trataba de un alguien muy conocido, al menos no en América Latina.
Este chico sufría de Esclerosis Múltiple y narraba que cuando le diagnosticaron la enfermedad se sumió en una gran depresión y hasta llegó a considerar el suicidio.
Algo sucedió que le dio un sacudón y lo hizo reaccionar y cuestionarse su actitud frente a la enfermedad y se dijo a él mismo estas palabras
“Deja de vivir de acuerdo a las expectativas de otros, comienza a vivir tus propias expectativas”
Y en ese momento se dio cuenta de que había estado viviendo su enfermedad de acuerdo con las expectativas de quienes le habían dicho que se trataba de algo terrible y que iba a pasar muy mal.
De allí en mas adoptó una actitud 100% proactiva con relación a su condición, investigó, cambió hábitos alimenticios, escribió varios libros para personas con esa misma enfermedad, lideró campañas de conscientizacion, retomó sus rutinas de ejercicio y un largo etcétera que dieron un giro radical a su vida en el mejor de los sentidos.
El chico sigue padeciendo la enfermedad, dice que tiene dolor la mayor parte del tiempo y que aun así vive su vida de acuerdo a SUS EXPECTATIVAS y eso le ha hecho su vida mucho más feliz y disfrutable.
Esta historia me pareció fabulosa y con una gran, gran enseñanza que llama a la reflexión…
¿En qué áreas de tu vida estás viviendo de acuerdo a las expectativas de alguien más?
¿Te dijeron que era imposible que pudieras vivir de las artes por ejemplo?
¿Te dijeron que eras una chica fea y que jamás un hombre te querría?
¿Te dijeron que era extremadamente difícil que llegases a ser un deportista profesional?
Te dejo la historia para que la reflexiones y puedas, a partir de ella, tomar acciones para ser PROTAGONISTA de tu vida y no permitir que otros tomen decisiones por tí.
Te quiero mucho y veo en tí un gran potencial de éxito y felicidad. Te lo digo con sinceridad.
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